el hotel parece encantador a simple vista. sin embargo, la recepcion no estaba disponible cuando llegamos y tuvimos que esperar más de 10min, algo totalmente inaceptable. Además, esperaba algo más que solo croissants de desayuno y una habitación que dejaba entrar ruido y luz. casi escribo una buena reseña, pero simplemente no pude.

me gustó la calefacción, muy buena para el frío. las escaleras son muy estrechas.

La calefacción muy buena, pero algo ruidosa.

Desayuno que alegra las mañanas

Las habitaciones son acogedoras y limpias, y el desayuno es muy completo, con opciones como embutidos y bollería recién horneada. El personal es amable y siempre dispuesto a ayudar.

Sin embargo, el ruido de la carretera puede ser molesto durante la noche y la calefacción, aunque efectiva, resulta un poco ruidosa.

El desayuno variado era un buen comienzo para el día.

La recepción no está disponible durante la noche, lo cual fue un gran inconveniente. Llegamos de esquiar y al dejar la llave, encontramos carteles que decían que debíamos llamar si necesitábamos algo, lo cual fue frustrante. Además, el ruido de la carretera era muy molesto, especialmente por la noche, ya que las ventanas no cerraban bien y la luz entraba sin problemas.

puedo recomendar este hotel a todos for una estancia flash

Acogedora habitación, excelente desayuno, notable atención del personal. Disfrutamos de una habitación espaciosa con una cama cómoda y un televisor. además, la conexión wi-fi gratuita y el bar/lounge fueron un gran plus para relajarnos después de un día explorando.

Honestamente puedo decir que no había nada que no me gustara.

La ubicación es ideal para acceder a las pistas, y la calefacción en la habitación fue excelente, especialmente dado el frío exterior. La limpieza diaria se realizó con gran cuidado, haciendo que el ambiente fuera siempre acogedor. Sin embargo, el ruido de la calle puede resultar bastante molesto durante la noche, y el desayuno, aunque correcto, podría ofrecer más opciones para ser más completo. noté que el espacio del comedor es un poco reducido, lo que puede hacer que las mesas estén demasiado juntas.

Wi-Fi gratis y bar acogedor, pero el ascensor es un poco pequeño.

Tuvimos un gran tiempo en el hotel con amigos. La ubicación es perfecta para esquiar y tienen una escuela de esquí. Nos encantó la limpieza y la calefacción, además el desayuno ofrece lo justo y necesario para comenzar el día. Nos recomendaron visitar algunas rutas de senderismo y quedar a explorar el maravilloso entorno del valle.

Una única cosa a mejorar sería el ruido exterior, que se escucha bastante desde las habitaciones. Para los que buscan tranquilidad, esto puede ser un inconveniente.

Nos alojamos en un lugar muy acogedor, con un desayuno delicioso que ofrecía fruta, tostadas y embutido. Además, había una escuela de esquí y un área de almacenamiento para esquís, lo cual fue genial para nosotros y mamá.

Mi mujer dice que sería ideal tener un guardaesquís más accesible para las familias.

Las habitaciones no son enormes, pero el desayuno es excepcional y la ubicación es excelente.

desayuno excepcional, buena ubicación, habitaciones pequeñas.

Repetí en Snoe Colomers y la experiencia fue encantadora. La atención de Laura es excepcional, siempre dispuesta a recomendar sobre el entorno. El desayuno es correcto, aunque las mesas del comedor están un poco juntas. La ubicación facilita el acceso a las pistas de esquí.

la atención excepcional de la propietaria y el desayuno incluye opciones sin lactosa para todos

El Hotel Snoe Colomers en Salardú es simplemente encantador. Desde el primer momento, la calidez de Laura y su dedicate acogedora nos hizo sentir como en casa. Las camas son súper cómodas, y el desayuno increíblemente variado, ¡que incluye opciones sin lactosa! No hay duda de que volveré.

La atención del personal fue excepcional, siempre dispuestos a ayudar. y el desayuno era realmente variado y delicioso, destacando los croisants y el embutido de calidad. La habitación era cómoda y limpia, con un baño amplio.

No pude encontrar nada malo.

La suite era tan amplia y acogedora que parecía el apartamento de un artista en una película de verano. Con WiFi gratis, un televisor que haría envidiar a cualquier salón y un baño con hidromasaje que te dejaba más relajado que un yogui en una clase de meditación. ¡No dejé de usarlo después de un día de esquí!

Ruido exterior